Consecuencias imprevistas de la educación de un seminario

En un discurso de convocatoria reciente para el Seminario Gateway de California, el presidente Jeff Iorg discutió “Las consecuencias imprevistas de una educación de seminario,” usando 1 Timoteo 6:3-10 como base de su mensaje. Un artículo de Baptist Press del 6 de septiembre informa:

Él les dijo a los estudiantes que espera que sus clases les resulten desafiantes en la preparación para una vida de ministerio — pero no ser impactados por las consecuencias no deseadas de la capacitación en el seminario. “Una consecuencia no deseada de su educación en el seminario es cuando su profundidad teológica excede el desarrollo de su carácter,” dijo Iorg.

Iorg contó que un diácono en una iglesia local llamó para pedir consejo sobre un conflicto que se estaba gestando entre el pastor y su congregación. El diácono explicó que el pastor había desarrollado algunas posiciones controvertidas para muchos en la iglesia. Sin embargo, el mayor problema fue que cuando los diáconos trataron de discutirlo con él, el pastor estalló de ira, marginó a su oposición y cuestionó su comprensión teológica.

“El pastor no sufría de falta de profundidad teológica,” Iorg dijo, “pero una falta de desarrollo del carácter. Cuando uno supera al otro, generalmente resulta el caos.”

La educación en un seminario también podría ser perjudicial en la medida en que un graduado prefiera debatir la doctrina con sus compañeros que compartir la verdad con la gente común, dijo Iorg

“Hay más estudiantes matriculados en los seis seminarios de la Convención Bautista del Sur que en cualquier otro momento de la historia,” él dijo, “pero nunca ha habido un momento en que nuestras iglesias sean menos efectivas en el evangelismo. Somos mejores discutiendo teología con nuestros compañeros que explicando el Evangelio a la gente común.

“Es vital que domines las profundidades y complejidades del Evangelio,” él dijo, “pero no estás completamente preparado hasta que puedas explicar el Evangelio a la gente común.”