Este puede ser un tema confuso, como se desprende de los siguientes pasajes de las Escrituras: Juan 14:2-3 “En la casa de mi Padre están muchas moradas…yo voy a preparar un lugar para vosotros. Y si me voy y os preparo lugar, vendré otra vez y os tomaré conmigo; para que donde yo estoy, vosotros también estéis.  Compare con Mateo 28:20, “he aquí, yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo”  La pregunta entonces es cómo puede él estar «con nosotros» a la vez. y se fue “preparando un lugar para nosotros” al mismo tiempo?

Aún más desconcertante, Apocalipsis 1:7 declara que cuando Jesús regrese “todo ojo le verá.” Sin embargo, los ángeles que estaban presentes cuando Jesús se fue en la nube les dijeron a los discípulos que no debían quedarse allí mirando al cielo… diciendo que Jesús volvería de la misma manera que lo vieron partir. (Hechos 1:11)  Como solo unos pocos lo vieron irse, solo unos pocos lo verían regresar. Este concepto se reafirma en 1 Tesalonicenses 5:2. Nuestro Señor regresaría “como un ladrón en la noche” es decir, en silencio, no observado por las masas, pero conocido por los observadores. 

El propósito de la segunda venida de nuestro Señor es que Él viene a establecer Su reino. Cuando la gente “ve” siendo demolido este orden maligno, ellos eventualmente reconocerán que es Jesús quien está destruyendo lo antiguo para establecer Su gobierno. “…sobre la angustia de las naciones en la tierra, con perplejidad; el mar y las olas rugiendo; desfalleciendo los corazones de los hombres por el temor y por esperar las cosas que sobrevendrán en la tierra; porque las potencias de los cielos serán conmovidas. Y entonces verán al Hijo del hombre viniendo en una nube con poder y gran gloria”. Lucas 21:25-27.

La humanidad no verá a Jesús con sus ojos literales: “Dentro de poco, el mundo no me verá a mímás, pero me verás,” Juan 14:19.  ¿Cómo vemos a Jesús? Los cristianos ven a Jesús a través de sus instrucciones en nuestros corazones y vidas. Por la fe, nos damos cuenta de que, “, a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados” Romanos 8:28. De la misma manera, eventualmente “todos los ojos lo verán” no con el ojo físico, sino con los ojos de su entendimiento.

Tanto física como espiritualmente Jesús está en el cielo, y seguirá estando allí después de su regreso, tal como siempre está en la mano derecha del padre… Piensa más en su regreso como cuando comienza a hacer un trabajo diferente que cuando estaba fuera.  La obra diferente está bien expresada en Hechos 15:14-16, “…Dios visitó al principio a los gentiles, para tomar de ellos pueblo para su nombre. Y a esto concuerdan las palabras de los profetas; como está escrito: Después de esto volveré, y reconstruiré el tabernáculo de David, que está caído; y volveré a edificar sus ruinas, y la levantaré”. Esto deja claro entonces que Él regresó porque vemos que se levantan las ruinas de Israel. (Esta es una cita de Amós 9:11-15).