El Adviento y andar en bicicleta

En una publicación de blog reciente, Mark Roberts escribe: “¿Por qué el Adviento es como aprender a andar en bicicleta? Porque nos cuesta mucho aprender a andar en bicicleta si nos enfocamos en no caernos. Cuanto más prestamos atención a lo negativo -no te caigas, no te caigas, no te caigas- más seremos atraídos mágicamente hacia el suelo. Pero, cuando comenzamos a enfocarnos en lo positivo, mirando hacia adelante, avanzando, manteniéndonos verticales, entonces aprender a andar en bicicleta es fácil.

“Del mismo modo, si, cuando se trata de Navidad, nos enfocamos en lo negativo —menos secular, menos consumista, menos apresurado, menos superficial—lo más probable es que nos cueste mucho lograr el objetivo de una Navidad más profunda, más verdadera y más auténtica. El Adviento nos permite centrarnos en lo positivo, en nuestra necesidad de Dios, en nuestra esperanza de un mundo mejor en la primera y segunda venida de nuestro Salvador.

“En mi experiencia, cuanto más enfóquese en el ‘Adviento’ positivo, más podremos redimir la Navidad y convertirla en un tiempo para acercarnos a Dios y celebrar Su venida entre nosotros. Milagrosamente, nos resultará más fácil dejar de lado el consumismo y el secularismo que amenazan con estrangular el verdadero espíritu de la Navidad.” (Haga clic aquí para leer el artículo completo).