El poderoso contraste entre la desobediencia de Eva y la obediencia de María
El caos, la lucha y la mutilación impregnan el mundo. Y todo por una pieza de fruta.
Bueno, va un poco más allá de eso, pero la tentación del árbol fue el catalizador que comenzó la caída de la humanidad.
La Biblia está lleno de historias de mujeres que influyeron en el reino de Dios. Sara fue la madre de Isaac cuyos descendientes produjeron al Mesías. Ester salvó a los judíos, y Débora condujo a Israel a batallas victoriosas.
El Nuevo Testamento nos habla de Isabel, la madre de Juan el Bautista, de María Magdalena, y de Priscila, mujer que junto con su marido, dio ayuda a Pablo y ayudó a predicar el mensaje de redención a un gran número de personas.
Pero dos mujeres en la Escritura dejaron un legado que ha afectado el futuro de los habitantes de la tierra, Eva y María, la madre de Jesús.
La decisión de cada mujer dejó consecuencias eternas, una sembró dolor para toda la humanidad y una dio a luz el camino de la redención.
¿Cómo contrastar la desobediencia de Eva con la obediencia de María?