Respecto a  oración, particularmente las oraciones de aquellos que aún no han aceptado a Jesús como su Salvador, el apóstol Pablo parece decirnos que Dios siempre está escuchando las oraciones de aquellos que pueden estar buscando entrar en una relación con Él y Su Hijo.  Hablando a los no cristianos en Atenas, Grecia, dice: “De un solo hombre hizo toda nación de hombres, para que habitaran toda la tierra; y les fijó los tiempos y los lugares exactos donde debían habitar. Dios hizo esto para que los hombres lo buscaran y tal vez lo alcanzaran y lo encontraran, aunque no está lejos de cada uno de nosotros.” (Hechos 17:26-27)

Dios contesta las oraciones de tres maneras:  1) Sí, te concederé lo que pidas o haré que suceda, 2) No, no puedes tener lo que quieres, y 3) Tal vez más tarde.  El objeto de la oración es poner el corazón y la mente del hijo de Dios en contacto con el corazón de Dios, para que el hijo sea capaz de darse cuenta de la paternidad de Dios, su amor y su profundo interés en cada punto de nuestro bienestar.   Si bien hay muchas escrituras que nos dicen que si le pedimos algo a Dios, él nos lo dará (Mateo 21:22, Mateo 7:7, Juan 11:22, Zacarías 10:1), también está la escritura en Santiago 4:3 que dice: “Pedís y no recibís, porque pedís con malos motivos, para gastarlo en vuestros deleites”

Hay dos cosas realmente hermosas acerca de Dios’ s Plan para la humanidad.  En primer lugar, la Biblia enseña que TODAS LAS PERSONAS SE SALVAN mediante el sacrificio que Jesús dio al morir en la cruz.  1 Corintios 15:21-22, “Porque por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un hombre vino la resurrección de los muertos  Porque así como en Adán todos mueren, así también en Cristo TODOS serán vivificados.”  1 Timoteo  2:3-6 dice, “Esto es bueno y agradable delante de Dios nuestro Salvador, el cual quiere que TODOS los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la verdad  Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre, quien se dio a sí mismo en rescate por TODOS, testimonio dado a su debido tiempo.” Efesios 2:4-5, 8  dice: “Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando nosotros muertos en nuestros pecados, nos dio vida juntamente con Cristo… Porque por gracia sois salvos por medio de la fe, y esto no de vosotros, pues es don de Dios.”

La segunda cosa hermosa del Plan de Dios es que habrá un futuro reino en la tierra “en el cual mora la justicia” (2 Pedro 3:13-14) y todo hombre, mujer y niño (así como la tierra) serán restaurados (Isaías 35:5-10) y se les enseñará a vivir con rectitud (Isaías 26:9).