Oración de Steve Brown, Key Life

Dios Todopoderoso, Padre nuestro, somos Tu pueblo y venimos ante Ti en nombre de nuestra nación, su gente y sus instituciones. Mientras nos regocijamos de que somos ciudadanos de otro Reino cuyo Rey nunca fue elegido y que nunca será depuesto, Tú, por Tu beneplácito, también nos has hecho ciudadanos de una buena tierra donde Tu Nombre ha sido conocido y honrado. Esa también es nuestra herencia.

No venimos ante Ti con arrogancia ni orgullo, sino con humildad y agradecimiento, por la forma en que nos has llamado a Ti y nos has hecho Tuyos. Pero, Padre, nuestro corazón está quebrantado por las naciones y, en particular, por el lugar donde nos has llamado a vivir, a trabajar y a adorar. Tú gobiernas a los pueblos de la tierra y todos los gobiernos, reyes, gobernantes y líderes están bajo Tu mano soberana. Señor, Dios, ten piedad de nuestra tierra y de nuestro pueblo.

Nos has puesto aquí para ellos. Nos has llamado a dar testimonio de tu bondad y de tu gobierno. Nosotros, tu pueblo, nos arrepentimos de los tiempos en que hemos sido conocidos por…
nuestra condenación más que nuestro amor,
nuestra ira más que nuestra compasión,
nuestro deseo de poder más que nuestro deseo de Tu gloria,
nuestra necesidad de tener razón en lugar de nuestra necesidad de Ti.

Padre, que nosotros, tu pueblo, defendamos la verdad y la justicia.

Danos convicciones que nos hagan fuertes y danos la gracia de nunca transigir.

Pero, Padre…

Haznos luz en las tinieblas donde la gente ha perdido el rumbo.

Haznos sal en los lugares insípidos y anodinos donde ya no eres conocido ni adorado.

Haznos como tu Hijo, Jesús, para que el mundo sea atraído hacia Él y no repelido por nosotros.

Padre, bendice a nuestra nación por causa de tu pueblo y por amor a Jesucristo, en cuyo nombre oramos. Amén.