Biblia

Rocío que cae y Martillos que caen

Rocío que cae y Martillos que caen

Especialmente los domingos, la predicación es primordial en la vida de un pastor. Cuando nos preparamos para predicar, recordamos que nuestras palabras deben caer «como lluvia suave sobre la hierba tierna»; y «como un martillo que rompe la roca en pedazos». Tal hablar no es simple. Orad por nosotros.
Escuchad, oh cielos, y hablaré;
y oiga la tierra las palabras de mi boca.
Caiga como la lluvia mi enseñanza,
destile como el rocío mi discurso,
como la lluvia mansa sobre la hierba tierna,
y como los aguaceros sobre la hierba.
Porque yo proclamaré el nombre de Jehová.
¡Atribuid grandeza a nuestro Dios! (Deuteronomio 32:1-3)

¿No es mi palabra como fuego, dice Jehová,
y como martillo que quebranta la roca? (Jeremías 23:29)