Seguro y sin condena por la gloria de Dios
Hace casi nueve años, Owen Shramek murió. Sus padres, una pareja joven de la Iglesia Bautista Bethlehem, se habían mudado al Medio Oriente para trabajar como pacificadores interculturales. Owen nació a las 24 semanas y el contexto médico redujo su probabilidad de supervivencia al 10 por ciento. Vivió en esta tierra por sólo 20 minutos.
Después de que los padres de Owen volaran de regreso a los Estados Unidos para su entierro, John Piper predicó su sermón fúnebre y consoló a su familia con la verdad de la Biblia. El pastor John enumeró ocho proposiciones sobre quién es Owen y su legado para la gloria de Dios.
- Owen Shramek fue y es un ser humano creado a la imagen de Dios.
- Owen Shramek fue y es su hijo.
- Owen Shramek está a salvo y sin condenación en la presencia de Jesucristo.
- Owen Shramek fue creado para glorificar a Dios.
- La duración de la vida de veinte minutos de Owen Shramek en la tierra era prácticamente indistinguible de la duración de la nuestra.
- Owen Shramek es más feliz hoy de lo que jamás haya sido la persona más feliz en la tierra.
- Owen Shramek fue una prueba para su fe.
- Owen Shramek es un regalo para usted y el Medio Oriente.
En su libro, The Hardest Sermons You’ll Ever Have to Preach, que incluye esta historia y el sermón completo, Bryan Chapell escribe:
El pastor Piper asume dos cargas críticas en este mensaje: 1) probar con las Escrituras que un recién nacido es incapaz de expresar fe puede, no obstante, estar eternamente a salvo y sin condenación, y 2) probar con las Escrituras que el corta vida de un recién nacido puede traer gloria a Dios y ch enojar el mundo. (119–126)
Un sufrimiento como este exige que la voz de Dios sea pronunciada con claridad y amor. Junto con los padres de Owen, para honrar a Owen y para la gloria de Dios, les encomendamos este sermón con la esperanza de que «la verdad aquí continúe hablando de gracia y consuelo de nuestro Padre bueno y bondadoso». /p>