Una vez le preguntaron a Billy Graham: “Si fueras pastor de una iglesia grande en una ciudad principal, ¿cuál sería tu plan de acción? ”

En el clásico moderno El plan maestro de la evangelización (que ha pasado por más de 100 impresiones desde que se publicó por primera vez en 1963), Robert Coleman reproduce la obra de Graham respuesta, quizás una respuesta sorprendente para muchos:

Creo que una de las primeras cosas que haría sería conseguir un pequeño grupo de ocho o diez o doce personas a mi alrededor que se reunirían algunas horas a la semana y pagarían ¡el precio! Les costaría algo en tiempo y esfuerzo. Compartiría con ellos todo lo que tengo, durante un período de años. Entonces en realidad tendría doce ministros entre los laicos que a su vez podrían tomar ocho o diez o doce más y enseñarles. Conozco una o dos iglesias que están haciendo eso, y está revolucionando la iglesia. Cristo, creo, estableció el patrón. Pasó la mayor parte de su tiempo con doce hombres. No lo pasó con una gran multitud. De hecho, cada vez que tuvo una gran multitud me parece que no hubo demasiados resultados. Los grandes resultados, me parece, llegaron en esta entrevista personal y en el tiempo que pasó con sus doce. (página 103, párrafo agregado)