Todos sabemos que Israel recibió los mandamientos del Creador como orden de guía. Entonces, ¿cuán beneficiosas son las leyes para nosotros los cristianos? Gracias al Salvador, ¿siguen siendo necesarios los diez mandamientos? (Ghana)
Le preguntaron a Jesús cuál era el mayor mandamiento. Esta fue su respuesta: “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con toda tu mente. 38 Este es el primero y grande mandamiento. 39 Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. 40 De estos dos mandamientos depende toda la Ley y los Profetas.” Mateo 22:37-40 (RVR60)
Así La Ley del Amor de Dios resume y cumple todos los Diez Mandamientos. Debemos amar a Dios supremamente y amarnos los unos a los otros como a nosotros mismos.
Jesús incluso añadió un nuevo mandamiento de amor. Aquí Jesús enfatizó la importancia de amar a otros creyentes cuando instruyó: “Un mandamiento nuevo os doy: que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros.” Juan 13:34 (RVR1960)
Este mandamiento va más allá de amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos. Así como Jesús murió por nosotros, debemos estar dispuestos a morir unos por otros. 1 Juan 3:14, 16 (NKJV), 14 “Nosotros sabemos que hemos pasado de muerte a vida, en que amamos a los hermanos… 16 En esto conocemos el amor, en que dio su vida por nosotros. Y también nosotros debemos dar nuestra vida por los hermanos.”
Por lo tanto, los Diez Mandamientos definitivamente guían y benefician a los cristianos. Además, debemos estar dispuestos a dar nuestra vida para servir a los hermanos y para glorificar a Dios.