Significado Bíblico de RELAMPAGO
Significado de Relampago
Ver Concordancia
(heb. bârâq; gr. astrape).
Descarga de la electricidad atmosférica con destellos brillantes de luz y
acompañados de truenos; puede ser de nube a nube o de tierra a nube.
Relámpagos y truenos acompañaron la manifestación de Dios en el monte Sinaí
(Ex. 19:16; 20:18), y relámpagos salían del trono de Dios en la visión que tuvo
Juan de la Divinidad (Ap. 4:5). En repetidas ocasiones los escritores bíblicos
presentan los relámpagos como evidencia del poder de Dios (Job 28:26; 37:3,
DHH; Sal. 77:18; 97:4; 144:6; Jer. 51:16) y hablan ellos como una de sus armas
contra los enemigos de su pueblo (2 S. 22:15; Sal. 18:14; Zac. 9:14). El ángel
que quitó la piedra de la tumba de Cristo tenía un brillo similar al del
relámpago (Mt. 28:3), y los seres vivientes de la visión de Ezequiel corrían de
una parte a otra como relámpagos (Ez. 1:13, 14). Estos acompañan las señales
reveladas bajo el 7º sello (Ap. 8:5), la 7ª trompeta (11:19) y la 7ª plaga
(16:18). Jesús afirmó que su venida sería un suceso visible, como un relámpago
que cruza el cielo (Mt. 24:27).
Diccionario Enciclopédico de Biblia y Teología: RELAMPAGO
RELÁMPAGO según la Biblia: En Siria y Palestina son frecuentes las tormentas durante la estación de las lluvias en primavera y otoño. Los relámpagos y rayos van frecuentemente acompañados de una fuerte lluvia o en ocasiones de granizo.
En Siria y Palestina son frecuentes las tormentas durante la estación de las lluvias en primavera y otoño. Los relámpagos y rayos van frecuentemente acompañados de una fuerte lluvia o en ocasiones de granizo.
En sentido figurado, los relámpagos son símbolo de la majestad terrible de Dios (Ap. 4:5; 11:19; cfr. Éx. 19:16); representan asimismo los juicios que se abatirán sobre Sus enemigos (Sal. 18:14; 144:6; Zac. 9:14).
La venida rápida e inesperada de Cristo en Su gloria se compara con el relámpago (Mt. 24:27). El poder de Dios se manifiesta por la manera en que ha dado camino al relámpago y al trueno (Jb. 28:26), que lanza según Su voluntad (Jb. 38:35).