LILIT

demonio femenino que habita en el desierto, denominado fantasma nocturno, Is 34, 14. Su origen es Eva, quien al reñir con Adán y se separa de él antes de quedar encinta, le abandona y se une al superior de los demonios. Sus hijos son fantasmas y ella misma es succuba, el Satanás femenino. Se le representa entre ruinas, en compañí­a de diversos animales de rapiña y carroñeros, con motivo del juicio a Edom, Is 4, 14-15.

Diccionario Bí­blico Digital, Grupo C Service & Design Ltda., Colombia, 2003

Fuente: Diccionario Bíblico Digital

tip, DIAB DIOS FAUN

vet, Esta palabra hebrea aparece en el Texto Masorético solamente una vez en el libro del profeta Isaí­as (Is. 34:14), en un pasaje donde el profeta describe la desolación que sobrevendrá a Edom. El autor sagrado menciona toda una serie de seres que en la mentalidad popular viven en la soledad. Allí­ aparecen los sátiros (LXX) y los gatos salvajes, y también Lilit, que en la demonologí­a babilónica es “el demonio femenino de las noches”. Lilit es, en la literatura talmúdica, una niña bruja que intervino en la tentación de Adán y que es la madre de demonios. No es factible que el profeta Isaí­as crea en toda esta mitologí­a cuando menciona a Lilit, pero es muy seguro que usara su nombre precisamente como una figura literaria que evocaba imágenes muy conocidas para sus contemporáneos, a la manera que la mención de Hitler las despierta en nosotros hombres del último cuarto del siglo XX. El pasaje tiene un mensaje claro: en la soledad, oscuridad y desolación de la maldad creada por la rebeldí­a humana habitan las criaturas más extrañas y ajenas al bien del hombre. Traducciones: La Biblia del Rey Jaime traduce “Screech Owl”, que ha sido revisado por “Night Monster”. La versión de Casiodoro de Reina traducí­a por “Lamí­a”, que ha sido corregida por “lechuza”. La Biblia de Jerusalén traduce “Lilit” (Is. 34:14). Muchos comentaristas (entre ellos Qumrán) identifican a Lilit con la diosa asirobabilónica de la lujuria. Los LXX tradujeron por “asno-centauro”. (A. Cohen: “Le Talmud”, Parí­s, 1950; G. Furlani: “La Religione babilonese e Assira”, Bolonia, 1928).

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado

(heb. lı̂lı̂ṯ, Is. 34.14, °ci, °bc, °bj; LXX onokentauros; Sim., Vg., lamia, así °vrv1 y °ta (Jerónimo, “furia vengadora”); °vrv2, “lechuza”; °vm “zumacaya”; °nbe “búho”; °vp “fantasma que espanta de noche”).

Este nombre aparece en una descripción de la terrible desolación de Edom, y ofrece grandes dificultades de interpretación. En una época en que la influencia bab. y persa iban en aumento, Lilit aparece evidentemente como un préstamo derivado del demonio femenino as. de la noche, Lilitu.

Empero, puede ser erróneo asociar necesariamente a este animal con la noche. la oscuridad que se decía que amaban algunos demonios era aquella ocasionada por las tormentas del desierto (cf. el sumerio LIL.LÁ, ‘viento tormentoso’; y también una conclusión posible basada en la traducción de Jerónimo mencionada arriba). Algunos eruditos lo consideran como equivalente al vampiro.

La literatura judía posterior habla diversamente de Lilit como la primera esposa de Adán, que sin embargo se escapó volando y se convirtió en demonio; como un monstruo fabuloso que robaba y destruía niños recién nacidos; y como un demonio contra el cual se utilizaban encantamientos para mantenerlo alejado de los lugares habitados por los hombres, para evitar que entrara y contagiara enfermedades.

No existe, sin embargo, ninguna prueba real para insistir en una interpretación mitológica de esta palabra, y quizás sea significativo que la mayoría de los otros seres mencionados en Is. 34 sean animales o aves reales. Si la versión de la LXX se entiende como algo semejante a un mono sin cola (cf. G. R. Driver, loc. Cit., pp. 55), parecería un frecuentador poco probable de lugares desolados. Una objeción similar se aplica tanto a la lechuza leonada como a la nocturna, ninguna de las cuales es ave desértica. Driver sugiere la chotacabras, varias especies de la cual se encuentran en los yermos.

Bibliografía. JewE; G. R. Driver, “Lilith”, PEQ 91, 1959, pp. 55–58.

J.D.D.

Douglas, J. (2000). Nuevo diccionario Biblico : Primera Edicion. Miami: Sociedades Bíblicas Unidas.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico