(ZENIT – Roma).- El presidente francés, Francoise Hollande, ha sido recibido hoy miércoles privadamente por el papa Francisco, en el estudio del Aula Pablo VI. El mandatario había tenido un encuentro con el Santo Padre el 24 de enero de 2014.
El jefe del Eliseo estuvo acompañado entre otros por el ministro del Interior, Bernard Cazeneuve y por el embajador francés ante la Santa Sede Philippe Zeller.
El presidente tuvo una conversación telefónica con el Papa, después del asesinado el 26 de julio pasado, del anciano sacerdote Jacques Hamel. Crimen cometido por dos jóvenes terroristas franceses de originarios de Magreb, mientras el clérigo celebraba la misa en la parroquia de Saint-Etienne-du-Rouvray, en Normandia.
Hollande le había expresado al Santo Padre su cercanía e indicado que “cuando un sacerdote es atacado, toda Francia se siente agredida”. Además le aseguró que se haría todo lo que está al alcance para proteger las iglesias en Francia.
El encuentro, según muchos analistas, permitirá mejorar las relaciones entre el Estado francés muy marcado por una cultura laicista y la Santa Sede. Y según fuentes del Eliseo, en particular encontrarán mayores coincidencias sobre los temas de la ecología, el terrorismo y la crisis migratoria.
En el 2014, señaló la Oficina de prensa de la Santa Sede, “en el contexto de la defensa de la promoción de la dignidad de la persona humana” se abordaron temas de actualidad, “como la familia, la bioética, el respeto de las comunidades religiosas y la tutela de los lugares de culto”.
Otros temas abordados fueron de carácter internacional, como “la pobreza, el desarrollo, las migraciones y el ambiente”.
Sobre Oriente Medio, Holland había subrayado en esa audiencia que “Francia se ha movilizado para que los cristianos se puedan quedar donde han vivido siempre durante siglos y para que no se exilien”.