El pasaje de Juan 3:31-36 contiene una rica teología sobre el origen y la autoridad de Jesús. Este segmento destaca la procedencia celestial de Jesús y su supremacía sobre todo lo terrenal. La frase “de arriba” se utiliza para diferenciar a Jesús, quien viene del cielo, de los que son de la tierra.
Interpretación Exegética
- Contexto del Pasaje:
- Contraste entre lo Celestial y lo Terrenal: El pasaje establece un contraste entre Jesús (“el que viene de arriba”) y los que son de la tierra. Jesús, siendo de origen celestial, tiene una autoridad y un conocimiento que superan a todo lo terrenal.
- Jesús “de Arriba”:
- Origen Celestial de Jesús: “El que viene de arriba” enfatiza que Jesús no es simplemente otro maestro religioso; su origen es divino y celestial. Esto resalta su autoridad única para revelar la verdad de Dios.
- Testimonio de lo Celestial: Jesús habla de lo que ha visto y oído en el cielo, lo que le da un testimonio veraz y autorizado sobre las realidades divinas.
- Supremacía de Jesús:
- Sobre Todo lo Terrenal: La distinción entre lo celestial y lo terrenal sirve para resaltar la supremacía absoluta de Jesús. Lo terrenal es limitado en su comprensión y alcance, mientras que lo celestial, representado por Jesús, es ilimitado y definitivo.
- La Recepción del Testimonio de Jesús:
- Aceptación del Testimonio: El pasaje sugiere que aceptar el testimonio de Jesús es fundamental para recibir la verdad de Dios. La fe en Jesús es presentada como esencial para el conocimiento verdadero de Dios.
- Rechazo del Testimonio: Aquellos que rechazan el testimonio de Jesús se describen como no creyentes, que no pueden acceder a la verdad divina que él ofrece.
- El Espíritu y la Autoridad de Jesús:
- Jesús da el Espíritu sin medida: A diferencia de los profetas del Antiguo Testamento que recibieron el Espíritu de Dios de manera limitada, Jesús posee el Espíritu sin restricción, lo que subraya su naturaleza divina y su autoridad absoluta.
Significado Teológico
Este pasaje de Juan subraya el origen divino y la autoridad suprema de Jesús. “El que viene de arriba” es una afirmación clara de su procedencia celestial, diferenciándolo de todos los maestros y líderes terrenales. La aceptación de su testimonio es presentada como esencial para el conocimiento verdadero de Dios y la recepción de la vida eterna. Este pasaje refuerza la idea de que Jesús no es simplemente un personaje histórico importante, sino la encarnación de la verdad divina, el portador del Espíritu Santo, y la revelación definitiva de Dios al mundo.