La soteriología es una rama de la teología cristiana que se dedica al estudio de la salvación. Este campo abarca el análisis de cómo, según la fe cristiana, la humanidad puede ser salvada de sus pecados y sus consecuencias, especialmente en términos de separación eterna de Dios. La palabra “soteriología” proviene de dos términos griegos: “soteria”, que significa salvación, y “logia”, que se refiere a estudio o discurso. Por lo tanto, la soteriología se ocupa fundamentalmente de las cuestiones relacionadas con el origen, la naturaleza, y el objetivo de la salvación, así como los medios por los cuales se efectúa.
En el corazón de la soteriología cristiana está la figura de Jesucristo, cuya vida, muerte, y resurrección se consideran fundamentales para la redención de la humanidad. Los teólogos soteriológicos exploran temas como:
- La naturaleza del pecado y la caída: Cómo el pecado afecta la relación entre Dios y los seres humanos y la necesidad de salvación que esto genera.
- La obra de Cristo: Cómo la vida, muerte, y resurrección de Jesús proporcionan la base para la salvación, incluyendo conceptos como sacrificio, expiación, y redención.
- La gracia de Dios: El papel de la gracia divina en la habilitación de los seres humanos para recibir la salvación.
- La fe y las obras: Cómo la respuesta humana a la gracia de Dios, a menudo entendida en términos de fe y, en algunas tradiciones, obras, contribuye al proceso de salvación.
- La justificación y la santificación: La justificación se refiere a ser declarado justo ante Dios, mientras que la santificación se refiere al proceso de ser hecho santo o transformado en semejanza a Cristo.
- La elección y la predestinación: Discusiones sobre hasta qué punto y cómo Dios elige a quienes serán salvados.
- La universalidad de la salvación: El debate sobre si la salvación está disponible para todos o sólo para un grupo selecto.
La soteriología no es simplemente una especulación teológica; tiene implicaciones prácticas y existenciales profundas para los individuos y las comunidades cristianas. Afecta cómo los creyentes entienden su relación con Dios, su propósito en la vida, y su destino eterno, así como cómo viven y practican su fe en el mundo.