EMAUS

Luk 24:13.


Emaús (gr. Emmaoús, “fuente de aguas termales [baños calientes]”; transliteración al gr. del aram. ‘Eme’us, de significado incierto). Aldea hacia la cual Cleofas y un compañero anónimo iban desde Jerusalén después de la resurrección de Jesús. Mientras estaban por el camino se les unió el Jesús resucitado, que conversó con ellos mientras caminaban hasta llegar a Emaús, donde los 2 discí­pulos descubrieron quién era el huésped. La aldea de Emaús, de acuerdo con la mejor evidencia textual, estaba a unos 11 km (60 estadios) de Jerusalén (Luk 24:13). El sitio no ha sido identificado definitivamente aún. Josefo dice que Tito tení­a una colonia de soldados en ‘Ammaous, a unos 5.5 km (30 estadios) de Jerusalén; ésta es probablemente Qalôniyeh, a unos 8 km al noroeste de Jerusalén. Desde el tiempo 375 de los cruzados, Kubeibeh, a unos 11 km al noroeste de Jerusalén por el camino romano, ha sido señalado como Emaús; sin embargo, algunos eruditos la han identificado con la moderna ‘Amwâs en la Sefela (la Emaús de 1 Mac. 3:40, 57; etc.). Pero ésta está a unos 24 km de Jerusalén, y demasiado lejos para Luk 24:13 Mapa XVI, E-2. Bib.: FJ-GJ vii.6.6.

Fuente: Diccionario Bíblico Evangélico

fuentes tibias. Sitio estratégico al nororiente de Jerusalén, en la Tierra Baja, región costera hacia las montañas de Judea. Cerca de E. Acampó el ejército seléucida, al frente del cual estaban Tolomeo, estratega de Celesiria y Fenicia, Nicanor, estratega militar, y Gorgias, primer amigo del rey Antí­oco IV Epí­fanes. Tení­an la misión de invadir y arrasar a Judea, pero Judas Macabeo los venció en E., 1 M 3, 38-40 y 57; 4, 1-27. Ca. 159 a. C., E. fue fortificada por Báquides junto con otras ciudades de Judea, 1 M 9, 50.

El dí­a de la resurrección Jesús se les apareció, en la tarde, a dos de sus discí­pulos que iban camino de E., Lc 24, 13. Este E., distinto del que se habla en 1 Macabeos, no se ha identificado plenamente.

Diccionario Bí­blico Digital, Grupo C Service & Design Ltda., Colombia, 2003

Fuente: Diccionario Bíblico Digital

Pueblo al cual se dirigí­an dos discí­pulos el dí­a de la resurrección de Jesús cuando se encontraron con él y lo reconocieron al partir el pan en la cena (Luk 24:7-35). Estaba a unos 12 km. de Jerusalén.

Fuente: Diccionario Bíblico Mundo Hispano

Una villa de Judea mencionada sólo en Lucas 24:13. Una de las apariciones de Jesús el domingo de resurrección fue a dos hombres que caminaban de Jerusalén a Emaús. El pasaje de Lucas sitúa la villa a 60 estadios de Jerusalén, ca. 17 kms. de distancia. Una distancia diferente, 160 estadios, se encuentra en unos pocos manuscritos unciales, sinaí­ticos (cuarto siglo), N (sexto siglo) K, Pi y Theta (noveno siglo), y un número de manuscritos minúsculos. †œ60 estadios† se encuentra en P75 (última parte del segundo o primera del tercer siglo), B (cuarto siglo), A (quinto siglo), C (quinto siglo) y otros. La evidencia de P75 (el recientemente publicado papiro Bodmer) y B (Codex Vaticanus) ambos establecen la distancia definitiva de †œ60 estadios†.
Se han propuesto tres identificaciones de Emaús: (1) La moderna villa de †™Amwas (publicación definitiva: H. Vincent and F. M. Abel, Emmaus: sa basilique et son histoire, Librairie Ernest Leroux, Paris, 1932). Sin embargo, estaubicación hubiera requerido que la distancia fuera †œ160 estadios† los cual es muy dudosa a la luz de las evidencias de los últimos manuscritos. (2) Una colonia militar de Vespaciano, posiblemente la Kaloniye, del dí­a de hoy, llamada Ammaous por Josefo. La distancia desde Jerusalén es de ca. 34 estadios, un poco difí­cil de concordar con el registro bí­blico. (3) La presente el Kubebe (publicación definitiva: P. B. Bagatti, I Monumenti di Emmaus El-Qubeibeh e dei dintorni, Franciscan Press, Jerusalén, Jordánia, 1947). Los restos aquí­ son definitivamente del perí­odo del Nuevo Testamento y la distancia desde Jerusalén concuerda más o menos bien con el registro de Lucas haciendo esta identificación la preferida.

Fuente: Diccionario Bíblico Arqueológico

Aldea †œque estaba a sesenta estadios de Jerusalén† (aprox. 11 km). Tras resucitar, el Señor Jesús apareció a dos discí­pulos que †œiban hablando entre sí­ de todas aquellas cosas que habí­an acontecido†. Jesús les declaró †œen todas las Escrituras lo que de él decí­an†. Cuando llegaron a E., †œél hizo como que iba más lejos†, y ellos le invitaron a quedarse. Cuando †œtomó el pan y lo bendijo…. les fueron abiertos los ojos, y le reconocieron; mas él se desapareció de su vista† (Luc 24:13-35). No se conoce con seguridad dónde quedaba E. En tiempos de los Cruzados se pensaba que era la aldea de Abu Ghosh, pero es más posible que se trata de Latrún, a 11 km al O de Jerusalén.

Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano

tip, CIUD

fot, dib00230

sit, a2, 255, 392

vet, = “aguas calientes” (hoy Amonas). Una aldea a 30 Km. al oeste de Jerusalén (Lc. 24:13, 29, 33). Jerónimo la sitúa donde empiezan a elevarse las montañas de Judá. Durante el sitio de Jerusalén por Tito, la 5ª legión romana acampó en sus alrededores. En el siglo tercero tomó el nombre de Nicópolis y fue asiento de un obispado.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado

[016]

Aldea a unos 30 Kms. al Oeste de Jerusalén, de donde eran los discí­pulos que se marchaban decepcionados por la muerte del Maestro y que El recuperó para su Reino en la más hermosa de la apariciones (Lc. 24 13-35).

Aparece como fortaleza en los tiempos de los Macabeos (1 Mac. 3. 57 y 4 .25), pero apenas si otra referencia bí­blica se puede encontrar. En la literatura y en el recuerdo cristiano quedó siempre como emblema del amor de Jesús, que sigue buscando a los que le abandonan por frustración y complejo de fracaso.

Quedan en el lugar restos de un templo cristiano del siglo III, lo que quiere decir que fue un lugar apreciado por los primitivos cristianos.

Pedro Chico González, Diccionario de Catequesis y Pedagogí­a Religiosa, Editorial Bruño, Lima, Perú 2006

Fuente: Diccionario de Catequesis y Pedagogía Religiosa

DJN

En el primer libro de Macabeos (3, 57-4, 25) Judas Macabeo vence a Gorgias, general de Antí­oco IV Epí­fanes en Emaús. Cfr. 1 Mac 9, 50. En el evangelio de Lucas (24, 13) se habla de Emaús como la aldea en la que los dos discí­pulos, uno de ellos llamado Cleofás, “reconocieron a Jesús al partir el pan”. Una escena (Lc 24, 13-35) que se ha convertido en sí­mbolo del encuentro existencial con Jesús resucitado. “Si tuviese que escoger en los evangelios (y quizá en la literatura universal) la página que me gustarí­a salvar de la nada serí­a la de los discí­pulos de Emaús” (JEAN GuiTToN, Croix, 17 avril 1960). No extraña, pues, que se haya vertido tanta tinta intentando identificar Emaús. Juntamente con la tradición histórica entran en juego la toponimia, la arqueologí­a, la paleografí­a y la crí­tica textual o estudio de los manuscritos.

La discusión gira en torno a Amwás (Nicópolis) y el-Qubeibeh. La primera localidad está situada a unos 29 kms. (160-170) estadios) al noroeste de Jerusalén, en el declive de la serraní­a que desciende lentamente hacia la llanura costera. La segunda se localiza a 11 kms. al oeste de Jerusalén (unos 60 estadios). Amwás coincide con el Emaús de Macabeos. A instancias del prefecto Julio el Africano, amigo personal de Orí­genes, la ciudad recibe el nombre de Nicópolis el año 223 d. de Cristo. En tiempo de los árabes, el lugar comienza a llamarse Amwás. Con este lugar identifican muchos el Emaús de Lucas. Y las principales razones son las siguientes: -Los habitantes de Palestina solamente conocen un Emaús y lo sitúan a 160 estadios de Jerusalén. -Eusebio de Cesarea, dice que Cleofás, mencionado en el evangelio de Lucas, era de Emaús, que ahora se llama Nicópolis, villa importante de Palestina (Chronicon, ed. Lagarde, 262). S. Jerónimo, narrando el viaje de Santa Paula, afirma que “llegó a Nicópolis, que en otro tiempo se llamó Emaús, donde el Señor, dándose a conocer en la fracción del pan, convirtió la casa de Cleofás en iglesia” (Patrologí­a Latina, XXII, 88). -Amwás-Nicópolis recibe una confirmación singular de todo el contexto evangélico. Si los dos peregrinos salieron hacia las ocho de la mañana de Pascua, pudieron llegar a Emaús hacia las dos o tres de la tarde, y estar de vuelta en Jerusalén a las siete u ocho de ese misma tarde, y antes si se sirvieron de caballerí­as.

Las excavaciones arqueológicas realizadas durante los años 1924-1930 por los dominicos de I’Ecole Biblique de Jerusalén, L. H. Vincent-F. M. Abel, hallaron en Amwás-Nicópolis una basí­lica de tres naves asentada sobre los cimientos de una romana de época tardí­a. Pero estos hallazgos lo único que prueban es la existencia temprana de una comunidad cristiana en Nicópolis. Esta es la teorí­a mantenida por los autores, principalmente de la órbita de L’Ecole Biblique de Jerusalén, como Vincent, Abel, D. Buzy, A. Brunot.

Otro grupo de investigadores sitúan el Emaús de Lucas en el lugar denominado el-Qubeibeh (a 11 kms. al oeste de Jerusalén). Y estas son algunas de las razones que aducen: -La distancia que exige el contexto evangélico cuadra mejor con el apunto de 60 estadios; y también con la nota de Marcos (16, 12): “se apareció a dos de ellos que iban de camino hacia el campo”. -Flavio Josefo (Bell 7, 6, 3) menciona una “aldea” llamada Emaús a 60 estadios de Jerusalén. -Se puede demostrar que desde el siglo XII, con los Cruzados, existe una tradición palestina que identifica el-Qubeibeh con el Emaús lucano. Pero las ruinas de una basí­lica del siglo VI indican que la tradición puede remontarse a siglos antes de los Cruzados. Esta teorí­a es mantenida por 1. Schuster-J. B. Holzammer, B. Bagatti, A. Vaccari y otros muchos estudiosos. Otras localizaciones: Qolonjeh, a 30 estadios al oeste de Jerusalén; Abu Gosh, a 8 estadios. Pero de esto no hay tradición alguna.

Sin entrar a valorar ambas posturas, tarea que supera nuestra finalidad, sí­ conviene decir que la lectura mejor atestiguada es la de 60 estadios. “La tensión entre la variante mejor “60 estadios” y la tradición que relaciona este lugar con la ciudad más alejada, de Nicópolis, debe resolverse mediante la historia de las tradiciones” (J. WANKE, DENT, 1, 1356). No debe darse excesiva importancia a las precisiones topográficas y toponí­micas en un relato fuertemente teologizado. Lucas sitúa el encuentro con Jesús resucitado en una secuencia de celebración eucarí­stica. Jerusalén tiene un significado teológico. Ya no es tanto un mero centro geográfico cuanto el centro de una historia de salvación: aquí­ se han realizado los planes de Dios y de aquí­ parten el dinamismo y expansión de los hechos salví­ficos. “El motivo de la partida o del regreso de los “discí­pulos de Emaús” subordina una antigua historia pascual a la intención del evangelista que quiere vincular con Jerusalén el de Pascua” (cfr. 24, 34) (J. WNAKE, , 1, 1357).

BIBL. – B. BAGATTI, monumenti di E. -el Qubeibeh e dei dintorni, Jerusalén, 1947; D. Buzy, ús dans I’Evangile et la traditión, Bible et Terre Sainte, 36 (mars 1961) 4-5; EMMAUS, pascale de la Fraction du pain, Bible et Terre Sainte, 36 (mars 1961), 5-11; J. WANKE, Emaús, en DENT, I, 1355-1357.

de Villapadierna

FERNANDEZ RAMOS, Felipe (Dir.), Diccionario de Jesús de Nazaret, Editorial Monte Carmelo, Burbos, 2001

Fuente: Diccionario de Jesús de Nazaret

El nombre parece que significa “manantial caliente”, aunque esto no es seguro. Tampoco se sabe con certeza en qué lugar estuvo situado. Hay no menos de cuatro pueblos modernos que dicen que son el Emaús del Nuevo Testamento, y las distancias a que se encuentran varí­an de 6 Kms. a 32 Kms.
Uno de los lugares más probables está situado como a 22 kilómetros al oeste de Jerusalén en el camino de Jaffa. En este lugar fue construido un templo y en años recientes fue reconstruido; ahora hay también un hospicio franciscano; un hospicio alemán, y una escuela. Cerca hay unas ruinas conocidas como Mizza, las cuales son probablemente del Mozah que se menciona en Josué 18:26 y que en el Talmud se describe como colonia. Josefo dice que Vespaciano la dio para que habitaran 800 hombres que despidió de su ejército. Probablemente por eso fue llamada colonia; el nombre actual es “Keeloniyeh” que sin duda se derivó de este hecho. Esta colonia ha resurgido y pertenece a los judí­os, los cuales han conservado el nombre antiguo, Mozah. Fue aquí­ hasta donde Jesús acompaño a los dos discí­pulos y habló con ellos después de la resurrección.

Fuente: Diccionario Geográfico de la Biblia

El pueblo adonde se dirigí­an Cleopas y otro discí­pulo cuando se les unió Jesucristo materializado el dí­a de su resurrección. Sin embargo, no lo reconocieron hasta que llegaron a Emaús y él estuvo reclinado con ellos a la mesa. Después que Jesús desapareció, †œen aquella misma hora†, los dos discí­pulos volvieron a Jerusalén. (Lu 24:13-33.) Lucas dice que el pueblo estaba a †œsesenta estadios† (7,5 millas romanas [11 Km.]) de Jerusalén.
En la actualidad no se puede precisar la ubicación exacta de Emaús. Se han propuesto al menos una docena de lugares diferentes. El más importante de estos es `Amwas, situado en la carretera que va a Tel Aviv-Yafo. No obstante, `Amwas está a unos 175 estadios (32 Km.) al ONO. de Jerusalén, casi tres veces más lejos de lo que dice Lucas. Otro lugar propuesto con frecuencia, Qalunyah, ubicado en la carretera principal que va a Tel Aviv-Yafo y aceptado por algunos como la Ammaous a la que hace referencia Josefo, está a unos 35 estadios (6,5 Km.) de Jerusalén, demasiado cerca para encajar con el registro de Lucas. Por lo tanto, algunos prefieren identificar Emaús con El-Qubeiba, situado en una carretera romana que está más hacia el N. que los otros lugares propuestos. En este lugar se han encontrado restos que se cree que datan del perí­odo de las Escrituras Griegas. Su ubicación, a unos 60 estadios (11 Km.) al NO. de Jerusalén, armoniza con el relato bí­blico. No obstante, en la actualidad es imposible llegar a conclusiones definitivas sobre la ubicación de Emaús.

Fuente: Diccionario de la Biblia

Una aldea que se encontraba a 60 estadios (11 km) de Jerusalén, y a la que se dirigían *Cleofas y otro discípulo cuando se les apareció Jesús después de su resurrección (Lc. 24.13). El lugar no se ha podido ubicar con precisión. Una posibilidad es la población que todavía se conoce como Amwas, 32 km al ONO de Jerusalén, donde Judas Macabeo derrotó a Gorgias en el 166 a.C. (1 Mac. 3.40, 57; 4.3). Pero este lugar no coincide con la distancia indicada por Lucas (a menos que la lectura con la variante 160 estadios que aparece en el Codex Sinaiticus y otros ms(s). sea la que conserva el texto original); además, exige de los viajeros una caminata larga, si bien no imposible por cierto.

De los lugares que se encuentran a unos 11 km de Jerusalén se han sugerido dos. Había en el ss. I una aldea en El-qubeibeh donde los cruzados encontraron un fuerte denominado Castellum Emmaus; lamentablemente este nombre no puede rastrearse hasta el ss. I. Josefo (GJ 7. 217) se refiere a una colonia militar de Vespasiano en Ammaous, unos 6 km al O de Jerusalén. Se ha pensado que se trata de Kaloniye (lat. colonia) o con Jirbet Beit Mizza (la antigua Mozah); aquí la distancia tampoco corresponde, a menos que supongamos que los 60 estadios de Lucas querían decir la distancia total recorrida entre ida y vuelta.

Bibliografía. P. Benoit, Pasión y resurrección del Señor, 1971, pp. 303–310; G. Ricciotti, Vida de Jesucristo, 1978, pp. 708–711.

J. Finegan, The Archaeology of the New Testament, 1969, pp. 177–180; ZPEB, 2, pp. 299s.

I.H.M.

Douglas, J. (2000). Nuevo diccionario Biblico : Primera Edicion. Miami: Sociedades Bíblicas Unidas.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico

Sede titular en Palæstina Prima, sufragánea de Cæsarea. Se menciona por primera vez en 166-65 a.C., cuando Judas Macabeo derrotó allí al ejército de Gorgias (1 Mac. 3,40; 4,25). Un poco más tarde el general sirio Báquides la fortificó y guarneció (Josefo, Ant. Jud., XIII, I, 3). En el año 4, durante la rebelión de Atrongio contra los romanos, los habitantes abandonaron la ciudad, que fue, sin embargo, destruida por Varo (Josefo, “Ant. Jud.” XVII, X, 7-9; Idem, “Bel. Jud.”, II, IV, 3). Pronto se levantó de nuevo, pues Josefo (Bel. Jud., III, III, 5) y Plinio (Mist. nat., V, XIV) la colocan entre las “toparquías” del país. Vespasiano la tomó a principio de su campaña contra los judíos, estacionó una legión en la vecindad y la nombró Nicópolis (Sozomeno, Hist. Ecl. V 21). Según Eusebio y San Jerónimo, este nombre le fue dado sólo en 223 por Julio Africano, su gobernador e hijo más ilustre, y este es el nombre usado comúnmente por los escritores cristianos. Por orden de Juliano el Apóstata (Sozomeno, Hist. Eccl., V, XXI) allí se cerró un manantial en el que se dice que Cristo se lavó sus pies, y que tenía fama de curar todas las enfermedades.

Se conocen cuatro obispos griegos, desde el siglo IV al VI (Le Quien, Or. christ., III, 593). Al comienzo de la conquista árabe de la plaga se desató en la ciudad, y los habitantes huyeron; sin embargo, parece que regresaron pronto, pues Emaús continuó siendo una ciudad muy importante. Fue la última estación de los cruzados en su camino a Jerusalén en junio de 1099. Eubel (Hierarch. Cath., II, 223) tiene una lista de once obispos titulares latinos, pero sólo en el siglo XV. Para 1912 `Am’was (el nombre original) era una aldea musulmana a unos dieciocho millas de Jerusalén, en el camino a Jaffa. Hay ruinas aún visibles de una hermosa basílica construida en el siglo IV o V, y reparada por los cruzados. Cerca de `Am’was, en El-Atroun, los trapenses fundaron un priorato en 1890.

En la opinión de muchos `Am’was es el Emaús del Evangelio (Lc. 24,13-35), donde Cristo se manifestó a dos de sus discípulos. Tal es, en efecto, la tradición de la Iglesia de Jerusalén, atestiguada ya en el siglo IV por Eusebio de Cesarea, Tito de Bostra y San Jerónimo, una tradición confirmada por todos los peregrinos, al menos en la época de las Cruzadas; puede incluso remontarse al siglo III, a Julio Africano y Orígenes. También es apoyada por muchos comentarios sobre la Biblia, algunos de los cuales son tan antiguos como el siglo IV o V; y en éstos se dice que el Emaús del Evangelio estaba situado a 160 estadios de Jerusalén, mientras que el moderno ‘Am’was está a 176 estadios. A pesar de su antigüedad, esta tradición no parece estar bien fundada. La mayoría de los manuscritos y versiones sitúan a Emaús a sólo sesenta estadios de Jerusalén, y ellos son más numerosos y por lo general más antiguos que los del primer grupo. Por lo tanto, parece muy probable que el número 160 es una corrección de Orígenes y su escuela, para hacer que el texto del Evangelio concordase con la tradición palestina de su época. Por otra parte, la distancia de 160 estadios implicaría una caminata de seis horas, lo cual es inadmisible, pues los discípulos habían ido sólo al campo y pudieron regresar a Jersualén antes de que se cerrasen los portones (Mc. 16,12; Lc. 24,33). Finalmente, se dice que el Emaús del Evangelio era sólo una villa, mientras que ‘Am’was era la capital floreciente de una “toparquía”. Josefo (Ant. Jud., VII, VI, 6) menciona una villa llamada Ammaus a 60 estadios de Jerusalén, donde Vespasiano y Tito estacionaron 800 veteranos. Esta es evidentemente el Emaús del Evangelio. Pero debe haber sido destruida en el momento de la revuelta de Bar-Cocheba (132-35 d.C.) en tiempos de Adriano, y su ubicación era desconocida tan temprano como el siglo III. Orígenes y sus amigos simplemente colocaron el Emaús del Evangelio, el único Emaús conocido en su tiempo. Las identificaciones de Koubeibeh, Abou Gosh, Koulonieh, Beit Mizzeh, etc, con Emaús, según lo propuesto por algunos estudiosos modernos, son inadmisibles.

Bibliografía: RELAND, Palestina (Utrecht, 1714), 425 30, 758 60; Palestine Exploration Fund, Quarterly Statement, 1876, 1879, 1881, 1883, 1884, 1885, etc.; BASSI, Emmaüs, città della Palestina (Turín, 1888); BUSSELLI, L’Emmaüs evangelico (Milán, 1885); DOMENICHELLI, L’Emmaüs della Palestina (Leghorn, 1889); GUILLEMOT, Emmaüs-Nicopolis (París, 1886); SCHIFFERS, Amwas, das Emmaüs des hl. Lucas, 160 Stadien von Jerusalem (Friburgo im Br., 1890); Revue biblique (1893), 26 40; VAN KASTEREN, Emmaüs-Nicopolis et les auteurs arabes, ibid. (1892), 80 99, 645-649; HEIDET in Dict. de la Bible, s.v.; MEISTERMANN, L’église d’Amouas l’Emmaüs-Nicopolis et l’église de Qoubeibeh, l’Emmaüs de saint Luc (Jerusalén 1902); VAILHÉ in Echos d’Orient (1902), 407 409; VINCENT, Les ruines d’Amwas in Revue biblique (1903), 571 99.

Fuente: Vailhé, Siméon. “Emmaus.” The Catholic Encyclopedia. Vol. 5. New York: Robert Appleton Company, 1909. 29 Nov. 2011
http://www.newadvent.org/cathen/05405a.htm

Traducido por Luz María Hernández Medina.

Fuente: Enciclopedia Católica