KABBALA

Doctrina esotérica y mí­stica judí­a. Se indica el siglo XIII como punto de partida. Estas creencias influyeron en los judí­os expulsados de España a fines del siglo XV.
Algunos especialistas han tratado de encontrar su fundamento en escritos bí­blicos como los de los profetas Ezequiel y Daniel. Pudiera tener sus raí­ces en el Sefer Yetzirá o Libro de la creación, atribuido al rabino Akiba, y en otros escritos, como el Sefer ha-Zohar o Libro del resplandor atribuido a Sefer ha-Bahir (siglo XII), a Simón ben Jochai (siglo XIII) y a Moisés de León, judí­o de Granada del siglo XIV.
La kábbala contiene elementos considerados como teosóficos, mientras otros parecen tener un carácter gnóstico. Algunos apuntan hacia un origen ocultista pues tiene elementos extraí­dos probablemente de formas de magia y brujerí­a. Según su interpretación, Dios está en un mundo superior e infinito y el hombre vive en uno inferior y finito.
El pensamiento cabalí­stico se divide en una corriente ocultista que incluye ® ASTROLOGíA, numerologí­a y encantamiento, y en una corriente eminentemente especulativa.

Fuente: Diccionario de Religiones Denominaciones y Sectas

Derivándose del hebreo qāḇal, «recibir», kabbala es una teosofía judía compuesta de elementos platónicos, gnósticos y judeo-alegóricos. Tendiendo a ser mística y esotérica, trata con problemas teológicos básicos como la naturaleza de Dios, el destino del hombre y el origen del universo. Las respuestas se construyen acudiendo a cifras (gematria), esto es, fórmulas y letras mágicas. El kabalismo prosperó en el siglo trece en Alemania, España e Italia, especialmente como una reacción al aristotelianismo de Maimónides. Pico di Mirandola (1463–94), un antiguo kabbalista cristiano, afirmó que toda doctrina cristiana era algo latente en la kabbala judía. Otros cristianos en esta tradición fueron Reuchlin (1455–1522) y Fludd (1574–1637). La gran fuerza del kabbalismo estaba en que reprimió el racionalismo desenfrenado, y su gran debilidad fue que redujo la religión a un mero misticismo, magia y superstición.

David H. Wallace

Harrison, E. F., Bromiley, G. W., & Henry, C. F. H. (2006). Diccionario de Teología (351). Grand Rapids, MI: Libros Desafío.

Fuente: Diccionario de Teología