Realizar devocionales en familia es una manera hermosa de crecer juntos en la fe. Aquí tienes cinco pasos para establecer y mantener esta práctica:
1. **Elige un Tiempo Adecuado**: Encuentra un momento del día en que todos los miembros de la familia puedan reunirse sin prisas, como por la mañana o antes de acostarse.
2. **Prepara el Ambiente**: Crea un ambiente tranquilo y respetuoso. Puede ser útil sentarse en un lugar cómodo y sin distracciones, como el salón o un área de estudio.
3. **Lectura y Reflexión**: Elige un pasaje bíblico o un tema para cada día. Lee el texto y reflexiona sobre su significado. Es importante que sea adecuado para todas las edades presentes.
4. **Compartir y Discutir**: Anima a cada miembro de la familia a compartir sus pensamientos, preguntas o cómo pueden aplicar lo aprendido en su vida diaria. Este es un momento para escuchar y aprender los unos de los otros.
5. **Oración Final**: Concluye con una oración. Puedes orar tú mismo, o invitar a otros miembros de la familia a hacerlo. La oración puede ser por las necesidades de la familia, por dar gracias, o por pedir orientación sobre lo aprendido.
Recuerda que la consistencia es clave. Trata de hacer de los devocionales una práctica regular para fomentar el crecimiento espiritual y la unión familiar.
Ejemplo de Devocional
Aquí tienes un ejemplo de cómo podrías estructurar un devocional familiar:
**Tema**: La Gratitud
**Pasaje Bíblico**: 1 Tesalonicenses 5:16-18: “Estad siempre gozosos, orad sin cesar, dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús.”
**Pasos**:
1. **Introducción**: Comienza con una breve introducción sobre el tema de la gratitud, explicando cómo ser agradecidos en todas las circunstancias puede cambiar nuestra perspectiva de la vida.
2. **Lectura del Pasaje**: Lee el pasaje de 1 Tesalonicenses 5:16-18. Si hay niños, podrías pedirles que lo lean o expliquen con sus palabras lo que entienden.
3. **Reflexión y Discusión**: Comparte una breve reflexión sobre lo que significa este pasaje. Por ejemplo, puedes hablar sobre la importancia de mantener una actitud de gratitud incluso en momentos difíciles. Luego, abre un espacio para la discusión familiar. Puedes hacer preguntas como: “¿Por qué creen que es importante dar gracias?” o “¿Pueden compartir una experiencia donde se sintieron agradecidos a pesar de las dificultades?”
4. **Aplicación Práctica**: Propon un desafío semanal. Por ejemplo, cada miembro de la familia podría anotar algo por lo que está agradecido cada día de la semana. Luego, en el próximo devocional, podrían compartir sus experiencias.
5. **Oración Final**: Cierra con una oración. Da gracias por las bendiciones recibidas, pide ayuda para reconocerlas incluso en los momentos difíciles, y solicita una actitud de gratitud constante en la familia.
Este formato puede ajustarse según las necesidades y la edad de los miembros de la familia. Lo importante es mantener un ambiente de apertura y respeto, donde todos se sientan cómodos para compartir y crecer juntos en la fe.