Estudio Bíblico de los Dones Espirituales
La discusión sobre el propósito de los dones espirituales en el contexto bíblico se centra principalmente en dos objetivos fundamentales: la edificación de la Iglesia y la glorificación de Dios. Estos propósitos están intrínsecamente conectados y se reflejan en varias enseñanzas del Nuevo Testamento.
Edificación de la Iglesia
- Fortalecimiento Comunitario: Los dones espirituales son otorgados a los individuos no para su beneficio personal o engrandecimiento, sino para el bien común (1 Corintios 12:7). Cada don contribuye al crecimiento y fortalecimiento de la comunidad de creyentes.
- Promoción de la Unidad y Diversidad: La diversidad de dones refleja la diversidad en el cuerpo de Cristo. Como en un cuerpo humano, donde cada parte tiene su función específica, en la Iglesia, cada miembro contribuye de manera única (1 Corintios 12:12-27). Esta diversidad de dones y servicios promueve la unidad en la diversidad.
- Madurez Espiritual: Efesios 4:11-13 indica que los dones son para la perfección de los santos, para la obra del ministerio y para la edificación del cuerpo de Cristo, hasta alcanzar una madurez espiritual. El uso correcto de los dones conduce a una mayor comprensión de Cristo y a una fe más profunda.
- Respuesta a las Necesidades: Los dones permiten a la Iglesia responder efectivamente a las necesidades tanto espirituales como físicas de sus miembros y de la comunidad más amplia.
Glorificación de Dios
- Manifestación del Poder y la Presencia de Dios: Los dones espirituales son una manifestación tangible del poder y la presencia de Dios en la Iglesia. A través de ellos, Dios se revela a su pueblo y al mundo (Hechos 2:11).
- Testimonio al Mundo: Los dones espirituales sirven como testimonio al mundo exterior. Los milagros, la profecía, y otros dones pueden servir como señales que señalan a la realidad y el poder de Dios, atrayendo a otros hacia la fe (Hechos 8:6).
- Expresión de Gratitud y Adoración: El uso de los dones en servicio a Dios y a los demás es una forma de adoración y gratitud. Al utilizar los dones para servir, los creyentes honran a Dios y expresan su amor y dedicación a Él (1 Pedro 4:10-11).
- Cultura de Servicio y Amor: El uso de los dones fomenta una cultura de servicio y amor en la Iglesia, reflejando el carácter de Cristo. Esto glorifica a Dios al mostrar su naturaleza amorosa y servicial a través de sus seguidores.
Los dones espirituales son esenciales para la vida y el crecimiento de la Iglesia, no solo fortaleciendo internamente a la comunidad de creyentes, sino también sirviendo como un medio para manifestar la gloria de Dios en el mundo. Su uso adecuado refleja la diversidad, unidad, amor y poder de Dios, invitando a otros a conocerlo y a glorificarlo.