Elohim: La Revelación Divina en el Judaísmo
La unidad de Dios y la creencia en un Dios único son conceptos centrales en el judaísmo, y se consideran uno de los pilares fundamentales de la fe judía. Estos conceptos teológicos están arraigados en la tradición judía y se reflejan en el monoteísmo estricto que caracteriza esta religión. Aquí se explica con más detalle la unidad de Dios y la creencia en un Dios único en el judaísmo:
1. La Unidad de Dios (Monoteísmo): La esencia de la creencia judía es la afirmación de la unidad absoluta de Dios. Esto se expresa en la declaración del Shemá, una oración esencial en el judaísmo, que se encuentra en el libro de Deuteronomio: «Escucha, Israel: El Señor nuestro Dios, el Señor uno es» (Deuteronomio 6:4). Esta declaración, conocida como el Shemá Israel, establece la creencia en un Dios único e indivisible.
2. La Creencia en un Dios Único: Los judíos creen firmemente en un solo Dios, sin igual y sin asociados. Este Dios único es la fuente de toda la existencia y la autoridad suprema sobre el universo. El judaísmo rechaza cualquier forma de politeísmo o creencia en múltiples dioses.
3. La Relación con Dios: En la tradición judía, Dios se considera el Creador y Sustentador del mundo. Los judíos mantienen una relación directa y personal con Dios a través de la oración, el estudio de la Torá (ley y enseñanzas divinas) y la observancia de los mandamientos (mitzvot). La fe en la unidad de Dios fortalece esta relación íntima.
4. La Exclusión de Imágenes y Ídolos: El judaísmo prohíbe la creación y la adoración de imágenes y representaciones de Dios, ya que esto podría comprometer la creencia en la unidad divina. Esta prohibición está en línea con el segundo mandamiento de los Diez Mandamientos: «No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra» (Éxodo 20:4).
5. El Monoteísmo Ético: La creencia en un Dios único también se relaciona con la idea del monoteísmo ético en el judaísmo. Dios es considerado la fuente de la moralidad y la justicia, y los mandamientos divinos, como los Diez Mandamientos, proporcionan un código ético para la vida de los judíos y la humanidad en general.
6. La Diferenciación de Dios en los Nombres Divinos: A pesar de la unidad divina, el judaísmo reconoce varios nombres divinos, como Elohim, Yahweh (YHVH), El Shaddai, entre otros, que pueden enfatizar diferentes aspectos de la relación de Dios con la humanidad y el mundo, pero siempre dentro del contexto de la unidad divina.
En resumen, la unidad de Dios y la creencia en un Dios único son conceptos esenciales en el judaísmo. Estos principios forman la base de la fe y la práctica religiosa judía, y reflejan el compromiso del pueblo judío de adorar y servir a un solo Dios, el Creador y Sustentador del universo.