¿Crees que está mal tener coros para cantar fuera de la adoración (después de que la adoración ha sido cancelada)? Si es así, ¿qué hace que sea incorrecto cantar canciones religiosas con instrumentos musicales fuera del culto? ¿Son estas cosas completamente incorrectas o deben considerarse un mal juicio?
Primero, solo porque la asamblea ha sido “despedida” no le da a la iglesia licencia para adorar a Dios individualmente de la manera que nos plazca. ¿Sería aceptable ofrecer incienso con sus oraciones cada noche antes de acostarse, siempre y cuando no se haga en la asamblea? La adoración, ya sea en la asamblea o fuera, debe hacerse de acuerdo con la autoridad de Dios (Col. 3:17).
Segundo, no tengo ningún problema en escuchar un coro o cuarteto a cappella provisto que tales grupos no me impidan adorar a Dios mientras cantan. Es decir, nadie tiene derecho a decirle a otro cristiano: ‘Estoy adorando ahora; cállate.” Si algunos van a adorar cantando, entonces todos deben tener la oportunidad de adorar cantando; después de todo, el canto debe hacerse unos a otros (Ef. 5:19, Col. 3:16).
Tercero, algunos argumentan que usar el instrumento para acompañar las canciones del evangelio fuera del servicio de adoración es aceptable ya que no pretende ser adoración. Sin embargo, aquellos que lo hacen son culpables de no respetar las cosas santas. Hay un principio en las Escrituras de que las cosas santas no deben hacerse comunes, y las cosas comunes no deben ser santificadas, a menos que Dios las haya hecho santas (Hechos 10:15). ¿Qué derecho tenemos de tomar la música sagrada y hacerla común? Sugiero que no tengamos ninguno. Pero eso es exactamente lo que hacemos cuando tomamos canciones diseñadas para adorar y alabar a Dios y las denigramos simplemente con el propósito de entretener. Es por eso que no canto canciones espirituales fuera de la asamblea de adoración con instrumentos. Es pecaminoso hacer algo común que Dios ha hecho santo.