Amado Dios,
Me presento ante ti arrepentido de los errores que he cometido.
Sé que he fallado a tu amor y a tu confianza.
He cometido actos de maldad, egoísmo y desobediencia.
He lastimado a los demás, y he causado dolor y sufrimiento.
Reconozco que mis acciones han sido equivocadas, y que he necesitado tu perdón.
En el Salmo 51:1-2, David dijo: «Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones. Lávame más y más de mi maldad, y límpiame de mi pecado.»
Estas palabras me dan esperanza de que tú puedes perdonarme y limpiarme de mis pecados.
Te pido que me ayudes a corregir los errores que he cometido.
Dame sabiduría para tomar mejores decisiones, y dame fuerza para resistir las tentaciones.
En el Salmo 119:11, dice: «En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti.»
Quiero guardar tus palabras en mi corazón, y vivir de acuerdo a ellas.
Te pido que me ayudes a ser una mejor persona, y que me uses para tu gloria.
En el Salmo 51:13, dice: «Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí.»
Quiero que me crees un corazón nuevo, y que me des un espíritu recto.
Confío en ti, y te doy gracias por tu perdón y tu misericordia.
En el Salmo 103:10, dice: «No hay en él injusticia, ni iniquidad en sus obras.»
Sé que tú eres justo y misericordioso, y que me perdonarás si me arrepiento de mis pecados.
En el nombre de Jesús, amén.
Amén.