Estudio Sobre la Inspiración Divina de la Biblia
Hay varias bases bíblicas que respaldan la creencia en la inspiración divina de la Biblia. Aquí hay algunas de las principales:
- 2 Timoteo 3:16-17: Este pasaje dice: “Toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir y para instruir en la justicia, a fin de que el siervo de Dios esté enteramente capacitado para toda buena obra”. Aquí, el apóstol Pablo afirma claramente que toda la Escritura es inspirada por Dios, lo que implica que tiene un origen divino y que es útil para la enseñanza y la instrucción en la vida cristiana.
- 2 Pedro 1:20-21: Este pasaje dice: “Sabiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada, porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo”. Aquí, Pedro enseña que los autores humanos de las Escrituras no hablaron por voluntad propia, sino que fueron movidos e inspirados por el Espíritu Santo en lo que escribieron.
- Juan 16:13: Jesús promete a sus discípulos que el Espíritu Santo los guiará “en toda la verdad”. Esto sugiere que el Espíritu Santo estuvo activo en la inspiración de los escritos bíblicos, asegurando que la verdad divina fuera transmitida de manera precisa.
- 2 Samuel 23:2: En este versículo, el rey David dice: “El Espíritu de Jehová ha hablado por mí, y su palabra ha estado en mi lengua”. Aquí, David reconoce que su capacidad para hablar y escribir palabras inspiradas proviene del Espíritu de Dios. Esto respalda la idea de que los escritos bíblicos fueron el resultado de la inspiración divina.
- 1 Corintios 2:13: Pablo dice: “De esto también hablamos, no con palabras enseñadas por sabiduría humana, sino con las enseñadas por el Espíritu, acomodando lo espiritual a lo espiritual”. Aquí, Pablo destaca que las enseñanzas que comunica no provienen de la sabiduría humana, sino del Espíritu Santo. Esto sugiere que los escritos bíblicos fueron influenciados y dirigidos por el Espíritu divino.
Estos son solo algunos ejemplos de las bases bíblicas para la creencia en la inspiración divina de la Biblia. En conjunto, estos pasajes y otros similares apuntan a la idea de que las Escrituras son la Palabra de Dios, escrita por autores humanos bajo la guía y dirección del Espíritu Santo.