Juan 17:11-19 Extranjeros Anónimos (Wigmore) – Estudio bíblico

Sermón Juan 17:11-19 Extranjeros Anónimos

Por el P. Bill Wigmore

(Este sermón fue entregado a un grupo que se estaba recuperando de la adicción al alcohol y las drogas).

Es posible que haya notado en las hojas de himnos que el título elegido para las lecciones de esta noche es Aliens. Anónimo. ¡Supongo que ser extraterrestres es solo una cosa más de la que tenemos que recuperarnos! ¡Transpórtame, Scottie!

Pero el evangelio sí habla de Jesús & sus seguidores sintiéndose como extraterrestres; y también nuestra lectura del Libro Grande. El Libro señala que la mayoría de nosotros sufrimos con un profundo sentimiento de que nunca pertenecíamos del todo.

Al igual que muchos de nosotros aquí esta noche, Bill Wilson sufrió esos mismos sentimientos.
Y también, como muchos de Para nosotros, esos sentimientos comenzaron para él cuando aún era muy joven, mucho antes de que tomara su primer trago.

Verás, su padre abandonó a la familia cuando Bill tenía 9 años y Bill vio a su padre marcharse la costa oeste, para nunca volver.

Bill estaba devastado pero dijo que escondió la herida y nunca habló de eso con nadie.

Llevó su dolor adentro donde nadie podía ver cuánto le dolía.

Su dolor era privado – él lamió sus heridas solo.

Un año después, la madre de Bill también se fue de casa, se llevó a su hermana, pero no a él y no sabes que cuando ella hizo eso, él se refugió aún más en sí mismo.

Fue abandonado y por dentro Bill Wilson estaba maduro para el olvido y hasta para el olvido que el alcohol y las drogas le traerían después.

Bill bebió y consumió drogas durante unos 15 años. Al principio, alivió su dolor y le dio un falso coraje. Le trajo un sentido de pertenencia muy necesario.

Pero el amigo & el consolador que encontró en la botella pronto se volvió contra él y cuando se volvió, lo hizo con venganza. A medida que los problemas y los dolores en su vida empeoraron, Bill hizo lo único que sabía hacer: se retiró más adentro de sí mismo.

Ahora doy ese pequeño y rápido bosquejo de la vida emocional o de sentimientos de Bill Wilson porque Quiero compartir con ustedes la historia que Bill siempre contaba cada vez que se levantaba para hablar frente a un grupo de AA. Es la historia de cómo se sintió Bill por dentro cuando su antiguo compañero de borracheras Ebby apareció inesperadamente en su cocina y le trajo la buena noticia de cómo se había recuperado de su batalla contra el alcohol.

Y mientras escuchamos a Bill describa sus sentimientos internos, espero que cada uno pueda sintonizar y escuchar para ver si algunos de sus interiores no coinciden con los nuestros porque creo que esta es quizás la mejor descripción que he escuchado sobre cómo se siente estar atrapado en una adicción.

Al igual que el himno de esta noche, Bill se sentía tan bajo como cualquier hombre podría llegar.

Había intentado y fracasado en el tratamiento tres veces, y dijo que cuando Ebby vino a verlo, se sentía como si su alcoholismo lo hubiera recluido en los recovecos de una cueva profunda y muy oscura. Y en el fondo de esa cueva, se sintió encadenado de pies y manos a una pared. No podía liberarse por mucho que tirase o lo intentara.

Y Bill dijo que podía ver a su familia parada en la entrada de esa cueva, llamándolo animándolo – rogándole que saliera y se uniera a ellos, pero por más que lo intentó, simplemente no pudo liberarse.

Y ahora aquí está la pieza que quiero que escuchemos.

Bill dijo que algo sucedió a él DENTRO el día que Ebby apareció en su cocina. Ebby estuvo sobrio durante 60 días y Bill sabía que era un alcohólico tan malo o peor que él y, sin embargo, allí se sentó un milagro – sentado frente a él en la mesa y contando su historia de cómo se había vuelto sobrio.

Bill describió sus sentimientos de la siguiente manera: dijo que era como si mi amigo de alguna manera se hubiera liberado de su propia cueva. eso era tan profundo y tan oscuro como el mío

y ahora de alguna manera se había abierto paso en el mío.

Ahora aquí estaba él aflojando mis cadenas,
aferrándose de mis manos
y diciéndome que sabía una salida si yo estaba dispuesto a seguirlo y hacer lo que él había hecho.

La primera vez que escuché esa historia supe exactamente qué Bill Wilson estaba hablando.
La primera vez que lo escuché estaba recién sobrio y escuché a alguien describiendo cómo se sentía estar yo adentro atrapado, perdido y solo.
En el Afuera, nuestras historias pueden haber sido diferentes, pero por dentro eran exactamente iguales.
Por dentro, me pregunto si todas nuestras historias no son iguales.

Y las historias del evangelio de esta noche son seleccionadas sobre ese mismo tema
Es la historia de cómo los seguidores de Jesús se sentía justo después de que su amigo & amp; líder había muerto y los había dejado solos Los escritores de los evangelios nos dicen que se sentían huérfanos y con miedo – deambulando por Jerusalén como extraterrestres.

Lo que acaba esta noche es el tiempo de Pascua
Si eres un obsesivo compulsivo y cuentas, esta noche es el séptimo y último domingo después de Pascua. Y aunque la Pascua recibe mucha atención, la temporada que viene después generalmente no lo hace.

Pero es una temporada realmente importante y tal vez sea un momento especialmente importante para nosotros, los alcohólicos y adictos.

Mira, esta es una temporada en la que los seguidores de Jesús finalmente lo consiguen por sí mismos.

Una temporada en la que encuentran la victoria en la derrota y construyen nuevas vidas a partir de lo que todo el mundo ve como fracaso y muerte.

Una temporada en la que cambian profundamente en el interior donde hacen el tipo de cambios espirituales que el libro dice que debemos hacer si queremos tener alguna esperanza real de permanecer sobrios.

Llegan a reconocer a Dios como presente en sus vidas y capaz de hacer por ellos lo que ellos no podrían hacer por sí mismos, pero Él está presente y lo está haciendo de una manera completamente nueva.

Ya sabes, He estado en este campo por lo que se siente como un tiempo bastante largo. Y he visto literalmente miles y amp; miles de alcohólicos pasan por el tratamiento.

Y muchos de estos hombres y mujeres parecen estar muy bien mientras están aquí en tratamiento y pasando por el proceso.

Mientras están aquí, están diciendo todas las cosas correctas.

Están mirando & suena realmente bien. Pero eso es por fuera. ¿Qué tal por dentro? ¿Qué está pasando dentro de su propia cueva? ¿Están entregando honestamente sus vidas al Dios de su comprensión cuando llegan al Paso 3? ¿Están enfrentando sus dolores sin miedo y abriendo sus heridas? compartirlos honestamente en el Paso 5?
¿Están siendo liberados en el fondo como lo fue Bill Wilson – y ¿están recogiendo las herramientas espirituales y siguiendo el camino espiritual que se ha trazado ante ellos?

El tiempo responderá esa pregunta para cada uno de nosotros tal como lo hizo para estos seguidores de Jesús.

Mira, ellos también lo habían hecho muy bien mientras Jesús estaba con ellos. Habían vivido de su fuerza y él había sido quien les proporcionaba su coraje.
Pero cuando murió, todos se batieron en rápida retirada. Estaban listos para renunciar a su sueño y regresar a sus cuevas. Y lo que escuchamos durante estas siete semanas más o menos después de la Pascua son historias de cómo encontraron su nueva vida y nueva esperanza.

Cómo descubrieron que Jesús todavía estaba con ellos pero con ellos de una manera completamente nueva.

Y lo que escuchamos en el evangelio de Juan es cómo fue que experimentaron al que llamamos: el Jesús Resucitado.

Jesús dice: Padre, ahora mantén a estos seguidores míos bajo tu protección .

Cuando estaba con ellos, los protegía, pero ahora regreso a ti y ahora tienen miedo de quedarse aquí solos y por eso tienen miedo.

Padre, ellos se sienten como extraterrestres en este mundo al igual que a veces me sentía como un extraterrestre, pero este es su mundo y aquí es donde debe hacerse su trabajo.

No los saque del mundo, Padre envíe que vuelvan a entrar en él.
Que vivan la vida en los términos de la vida.
Que tomen este mundo pecaminoso como es y no como les gustaría.

Pero a medida que avanzan en él, día a día, déjalos ser y déjalos sentir unido conmigo tal como yo estoy unido contigo.

¡Palabras poderosas!
Jesús no nos promete que las cosas serán fáciles en nuestra recuperación – pero promete alto y claro que estará con nosotros a través de todo. Él promete que nunca estaremos solos. Ni ahora ni nunca más. No más sentirse como extraterrestres –

No mientras estuviéramos dispuestos a tomar su mano y dispuestos a seguirlo de regreso a las cuevas de nuestros compañeros adictos y ayudarlos a liberarse como Ebby hizo con Bill.

Y, por favor, no espere hasta tener un año en su haber antes de intentar ayudar a alguien. No está en nuestras cabezas encontrarnos y llegar a conocer a este Jesús nuevo y resucitado, pero lo encontramos ayudando a los demás.

Ebby solo tenía 60 días sobrio cuando hizo su llamado, pero eso fue 60 días. más de lo que Bill tenía

Y Bill podía ver y sentir el milagro sentado justo frente a él.

Bill escuchó a Ebby decir su verdad, no le predicó, sino que solo le dijo su verdad

que él también se había sentido como un extraterrestre borracho, atrapado y muy solo
y que también se le acercó un hombre que dijo que conocía una manera salió
y le dijo que no era muy religioso pero que esto era espiritual y que había funcionado para él y tal vez funcionaría para Bill.

En el interior, Bill comenzó a volver a la vida ese día.

Cuando estás desesperado, encontrar la esperanza lo es todo.

Quiero cerrar ahora con un poema que fue escrito por Sam Shoemaker.

Shoemaker fue el sacerdote episcopal que ayudó a Ebby Thatcher y Bill Wilson a recuperar la sobriedad. Bill dijo que, a excepción del Paso Uno, todos los otros 11 Pasos le llegaron directamente a través de este hombre. Lo llamó su mayor maestro espiritual y este poema de Shoemakers resume su filosofía de una vida espiritual vivida al servicio del mundo.
Se llama: I Stand by the Door and its Shoemakers cry a la iglesia ora para que la iglesia nunca esté tan preocupada con la Pascua y con toda su teología — y con todas sus doctrinas y con toda su santidad — que se olvide de los que todavía están por ahí – los que están perdidos y solos los extraterrestres en nuestro mundo que aún no han encontrado su propia esperanza de Pascua.
Shoemaker escribe:

Yo tampoco voy demasiado adentro, ni demasiado afuera.
La puerta es la puerta más importante del mundo –
Es la puerta por la que los hombres caminan cuando encuentran a Dios.
Allí de nada me sirve entrar y quedarme allí,
cuando tantos están todavía fuera y ellos, tanto como yo,
anhelan saber dónde está la puerta.
Y todo eso tantos nunca encontrar
es sólo la pared donde debería estar la puerta.
Se arrastran a lo largo de la pared como ciegos,
Con las manos extendidas, palpando,
Buscando a tientas una puerta, sabiendo debe haber una puerta,
Sin embargo, nunca la encuentran. Así que me quedo junto a la puerta.

Lo más tremendo del mundo es que los hombres descubran que puerta – la puerta de Dios.
Lo más importante que cualquier hombre puede hacer es agarrar una de esas manos ciegas que andan a tientas y ponerla en el cerrojo – el pestillo que solo hace clic y se abre al toque del hombre.

Los hombres mueren fuera de la puerta, como mueren los mendigos hambrientos en las noches frías en ciudades crueles en pleno invierno. Morir por falta de lo que está a su alcance. Viven del otro lado, mueren porque no lo han encontrado.

Nada más importa comparado con ayudarlos a encontrarlo, abrirlo, entrar y encontrarlo. Así que estoy junto a la puerta.

Entren grandes santos; ir hasta el final en –
Bajar hasta los sótanos cavernosos,
Y subir hasta los áticos espaciosos.
Es una casa amplia y espaciosa, esta casa donde Dios está .
Adéntrate en lo más profundo de las ventanas ocultas,
Del recogimiento, del silencio, de la santidad.
Algunos deben habitar esos aposentos interiores
Y conocer las profundidades y las alturas de Dios,
Y llama al resto de nosotros lo maravilloso que es.
A veces echo una mirada más profunda.
A veces me aventuro un poco más,
Pero mi lugar parece más cercano a la apertura. Así que me quedo junto a la puerta.

Admiro a las personas que entran.
Pero me gustaría que no olvidaran cómo era
antes de entrar. Entonces podrían ayudar
a las personas que aún no han encontrado la puerta.

Puedes entrar demasiado profundo y quedarse demasiado tiempo
Y olvidarse de las personas que están fuera de la puerta.
En cuanto a mí, tomaré mi antiguo lugar acostumbrado,
Lo suficientemente cerca de Dios para escucharlo y saber Él está allí,
pero no tan lejos de los hombres como para no oírlos,
y recuerda que ellos también están allí.

¿Dónde? Fuera de la puerta –
Miles de ellos. Millones de ellos.
Pero – más importante para mí –
Uno de ellos, dos de ellos, diez de ellos.
Cuyas manos estoy destinada a poner en el pestillo.
Así que estaré junto a la puerta y espera
a los que la buscan.

Prefiero ser portero. Así que estoy junto a la puerta.

El salmo dice:

“Desde lo profundo, Señor, clamo a ti
Déjame sentirte incluso en esta oscuridad.”

Hay una puerta que conduce fuera de nuestras cuevas y de nuestra oscuridad hacia la luz de Dios.
Esa puerta es Jesús.

Que lo encontremos ahora.

Amén.