Introducción . Pablo, por medio del Espíritu, enseñaba y exigía la unidad religiosa (Efesios 4:1-3). Mostró que tal unidad es posible debido a la unidad esencial del sistema de Cristo (vss. 4-6). Hay un solo cuerpo, Espíritu, esperanza, Señor, fe y Dios Padre. En este pasaje, Pablo también enseñó que hay “un bautismo” (v. 5).
Hay varios bautismos diferentes mencionados en las Escrituras.. Por ejemplo, está el bautismo de Juan (Mateo 21:25), bautismo de sufrimiento (Mateo 2:22), bautismo de fuego (Mateo 3:11), bautismo del Espíritu (Hechos 1:5), y el bautismo en agua para el perdón de los pecados (Hechos 2: 38, 22: 16). El bautismo de fuego (sumergido en fuego, infierno) es futuro, el bautismo de Juan fue por un tiempo limitado (Hechos 19:3-5), el bautismo de sufrimiento fue único, y el bautismo del Espíritu tuvo un propósito especial para cierto grupo, nunca se supuso que fuera universal.
El único bautismo es el bautismo en agua, que es para la remisión de los pecados.. Dado que solo hay un bautismo (requerido y universal), obviamente es de gran importancia. Jesús encargó a sus apóstoles que predicaran en todo el mundo (Mc 16, 15, 16). En esta comisión debían enseñar y practicar el bautismo (Mc. 16: 16). El bautismo que practicaban universalmente era el bautismo en agua para el perdón de los pecados (cf. Hch 2, 14-41, etc.). Este bautismo era inmersión o sepultura en agua y era sometido por personas creyentes, penitentes que habían confesado la deidad de Cristo (Col. 2:12, Hechos 2: 36-38, Hechos 8: 35-40). Unos dos años después de que Pablo escribiera que hay un bautismo, Pedro escribió sobre un bautismo que salva (1 Pedro 3:21). Pedro dejó en claro que este bautismo salvador es el bautismo en agua (1 Pedro 3:20, 21).
Hay muchos llamados bautizos hoy. Algunos se realizan en bebés, algunos en personas que sostienen que ya se han salvado. Pero, ¿te has sometido al único bautismo verdadero del que leemos en las Escrituras?