Espíritu kundalini , o el espíritu de kundalini , es un término vinculado a algunas versiones de la fe carismática y asociado a creencias relacionadas con la opresión demoníaca . En estos enfoques espirituales altamente especulativos, los demonios son considerados la causa de casi todas las enfermedades, particularmente las espirituales. Esto alimenta la corriente de los llamados ministerios de liberación, que buscan exorcizar esos malos espíritus. Al tomar vagas referencias a ciertas palabras en las Escrituras fuera de contexto, tales creencias inventan toda una mitología de entidades demoníacas únicas y específicas que causan activamente sus efectos asociados.
El término kundalini proviene originalmente de la mitología y la religión orientales. en el hinduismo, kundalini es una energía similar a una serpiente que supuestamente descansa en tres espirales y media en la base de la columna vertebral humana. Cuando una persona realiza las técnicas espirituales adecuadas, este espíritu se extiende por todo el cuerpo en un “despertar”. Esto supuestamente da como resultado sucesos dramáticos que incluyen experiencias extracorporales, movimientos y sensaciones físicas, alucinaciones, etc.
Aquellos que creen en una versión de opresión demoníaca de kundalini hacen referencia a esos efectos. Luego extrapolan la existencia de una entidad demoníaca única, “el espíritu kundalini” o “el espíritu de kundalini”, que se asocia con mayor frecuencia con experiencias espirituales ostentosas. Algunos creyentes en este “espíritu de kundalini” apuntan a practicantes de la risa santa , embriaguez en el Espíritu, o ser inmolado en el Espíritu como si estuviera bajo su opresión.
Algunos otros sugieren que el “espíritu kundalini” tienta a las personas a practicar yoga, incursionar en el misticismo oriental, practicar la meditación budista, someterse a la acupuntura o hacer casi cualquier cosa asociada con las sociedades orientales. De acuerdo con el concepto de opresión demoníaca, muchos de los que creen en el “espíritu de kundalini” sugieren que el contacto con esas ideas invita a la atención y la influencia de ese espíritu.
Todavía otros sugieren que Kundalini es el nombre del demonio puesto “a cargo” por Satanás sobre las culturas orientales, como en la India, o que el espíritu kundalini se refiere genéricamente a cualquier tentación de buscar otros dioses, falsos maestros y distracciones espirituales.
Hay una profunda ironía en esta última interpretación. En sí mismo, este enfoque de los demonios y la opresión demoníaca no es bíblico. Existe una extraordinaria variedad de creencias sobre lo que es un “espíritu kundalini” y lo que hace. Esta es una característica común de los “ministerios” de liberación y opresión demoníaca. Las creencias se basan en tan pocas Escrituras (si las hay) y en tanta especulación y fantasía que no se puede encontrar una enseñanza coherente o consistente. Las funciones del “espíritu de kundalini” que posee una persona pueden superponerse por completo con el comportamiento de otros espíritus, con nombres como Leviatán, Pitón o Jezabel, o categorías asignadas como “espíritus del agua”.
Las Escrituras no nos dan ninguna razón para creer que existe una entidad específica llamada Kundalini o que los cristianos tienen alguna habilidad específica para reprenderla o exorcizarla. La Biblia tampoco indica que estemos destinados a diagnosticar problemas espirituales de esa manera. Si alguna entidad demoníaca está o no directamente involucrada en la lucha espiritual de una persona es irrelevante. No se ayuda a remediar la situación inventando una mitología de demonios y convirtiendo la Palabra de Dios en un libro de consulta de especulaciones salvajes. La oración, el discipulado y la obediencia a Dios son las únicas respuestas significativas a los problemas espirituales.